Los Vengadores nº38

En la sala de reuniones de los Vengadores tiene lugar el nacimiento de un nuevo grupo las Liberadoras formado por la Avispa, la Bruja Escarlata, Medusa, la Viuda Negra y la Valkiria. Su objetivo es luchar contra la tirania del sexo masculino, como primer paso pretenden derrotar a los Vengadores quienes han acudido a Rutland para participar en el desfile del día de Halloween. A esta ciudad también han acudido los Señores del Mal quienes lucharán contra los Vengadores. La aparición de las Liberadoras ayudará a los Vengadores a derrotar a los Señores del Mal. Posteriormente las Liberadoras lucharán contra los Vengadores a los que derrotarán. La llamada Valkiria, lider de las Liberadoras resulta ser la Encantadora que pretendía vengarse de los Vengadores y hacerse con un instrumento que la permita viajar a dimensiones paralelas. Pero su plan es frustado por la Bruja Escarlata, aunque la Encantadora desaparece misteriosamente.

La Bruja Escarlata tiene una extraña pesadilla en la cual ve morir al Caballero Negro (III) a manos de Arkón. Los Vengadores alarmados intentan contactar con el Caballero Negro (III) pero no lo consiguen. La premonición de la Bruja Escarlata es en parte cierta ya que Arkón ha hecho prisionero al Caballero Negro (III) como consecuencia de los pérfidos consejos de la Encantadora, que ha llegado al mundo de Arkón desde la Tierra. El Caballero Negro lo único que pretendía era destruir su espada Ebony que sufre un maligno hechizo, pero Arkón creía que desea arrebatarle el trono. Cuando Pantera Negra regresa con Thor, ambos presencian como la mansión se desvanece con los otros Vengadores ante sus ojos, ha sido transportada al mundo de Arkón. Alli los Vengadores luchan valientemente con las tropas de Arkón pero son hechos prisioneros. Pero Thor y Pantera también viajan a este mundo y liberan a los Vengadores y al Caballero Negro (III). La Encantadora huye y Arkón comprobará que el Caballero Negro decía la verdad por lo que pide disculpas a todos los Vengadores por lo que el considera un terrible error, al pensar que querían invadir su mundo.