Marvel Gold: Los 4 Fantásticos nº6 Pero ¿Quien Detendrá a Mente Suprema?

Crystal sufre un desmayo y Reed Richards la analiza y descubre que no ha desarrollado la resistencia necesaria para la contaminación y debe volver con los Inhumanos. En su sangre encuentra un compuesto químico que cree que puede devolver a la Cosa a su estado humano. La Chica Invisible ve una masa brillante y el Dr. Zolten Rambow intenta comunicarse con la criatura que se encuentra en su interior. Sue intenta contener a la criatura con su campo de fuerza y le pide a la Antorcha que avise a su marido, pero éste no puede interrumpir el experimento para curar a la Cosa.

Reed Richards abandona el experimento para curar a la Cosa, pero le pide a la la Antorcha que utilice su poder para asborber el calor, congelando el laboratorio. Mientras, la Chica Invisible se desmaya por el esfuerzo de contener a la criatura en su campo de fuerza. Reed llega a tiempo para rescatarla y el Dr. Zolten Rambow confiesa que la criatura es su hijo, que le estaba ayudando en la creación de un aparato para neutralizar las armas. La energía utilizada en el experimento fue absorbida por él. Reed reajusta el aparato y el Dr. Rambow devuelve a la normalidad a su hijo, pero una reacción inversa dirige los rayos hacia él, que se desmaya. El grupo vuelve al Edificio Baxter que empieza a descongelarse.

Tras el experimento, la Cosa puede revertir su estado a voluntad, pero sufre un cambio de caracter. Mientras, Janus se introduce en la Zona Negativa.

En la Zona Negativa, Janus, que posee la Nega-Energía, es seguido por Annihilus.

Reed Richards, Ben Grimm y Johnny Storm viajan a la Zona Negativa para impedir que Janus guíe a Annihilus a la Tierra. Reed pierde su señalizador luchando con Annihilus y no puede volver, siendo atraído por la atmósfera explosiva.

Reed Richards se encuentra perdido en la Zona Negativa pero Ben Grimm se muestra insensible. Susan deduce que el experimento que le dió la facultad de cambiar le ha afectado de algún modo. Johnny Storm consigue hacer llegar un señalizador a Reed para que pueda volver, pero Reed no se atreve a utilizarlo para que no sea seguido por Annihilus. Agatha Harkness lanza un hechizo para que aparezcan millones de figuras con el aspecto de Reed y éste lo aprovecha para volver. Ben, enloquecido, rompe con Alicia Masters, se enfrenta a sus amigos y se marcha.

La Cosa siembra el caos en la ciudad. Collins le da a Reed Richards veinticuatro horas para que se muden antes las quejas del resto de inquilinos. La Antorcha Humana pide la ayuda de Bruce Banner, pero ve a la Cosa luchando con un policía y se convierte en Hulk.

Hulk se enfrenta a la Cosa mientras Reed Richards busca una cura para éste. Alicia Masters intenta que Ben le escuche, pero éste recibe un golpe directo de Hulk que le deja inconsciente, aparentemente muerto.

Reed Richards se lleva a la Cosa a su laboratorio para salvarle. Ben se recupera y destruye la máquina con la que Reed quería devolverle a la normalidad, declarándose cansado de tantos cambios. De repente, aparece el Vigilante que les advierte contra Mente Suprema y desaparece. Agatha Harkness les advierte de un grave peligro. El alcalde emite un decreto obligando a la disolución de los Cuatro Fantásticos por el clamor de los ciudadanos. El grupo se entrega vigilados por el alcalde, que está controlado por Mente Suprema, quien quiere utilizar su poder para destruir el Universo.

Reed Richards paga la fianza para que el grupo quede en libertad. Mente Suprema se enfrenta a los 4 Fantásticos, descubre que sus poderes no son una amenaza para él y se marcha borrando el recuerdo del enfrentamiento de sus cerebros. Agatha Harkness les dice que sintió el peligro pero no sabe en qué consiste. Utiliza su poder para contactar con el Vigilante, que anuncia que les hablará de Mente Suprema, pero ese conocimiento no permitirá alterar el curso de los acontecimientos pues el Universo está condenado.

El Vigilante explica el origen de Mente Suprema. El resto de los 4 Fantásticos se dan cuenta de que Reed Richards ha sido controlado por Mente Suprema, pero consigue escaparse. El grupo se pregunta qué esperanza tiene el mundo cuando lo ha controlado tan fácilmente.

Mente Suprema derrota a los 4 Fantásticos excepto a Susan Richards que consigue huir. Agatha Harkness le revela que un prejuicio natural le impide acudir en busca de la única persona que puede ayudarles: el Dr. Muerte. Sue le convence para que les ayude. Muerte lidera al grupo, pero también es derrotado. De repente, aparece el Extraño que revela que fue creado para preparar el momento de su regreso y le derrota con facilidad. El Vigilante aparece ante los 4 Fantásticos y les explica que su papel fue crucial pues obligaron a Mente Suprema a emplear toda su fuerza y eso permitió al Extraño detectar su presencia.

Johnny Storm descubre que Crystal no volvió al Gran Refugio después de que Máximus tomara el poder y pide la ayuda de Agatha Harkness para localizarla. Ésta revela que Crystal no está más allá del mundo que conocen y no está en su mano llegar hasta ella. Ésta viajó al futuro teleportada por Mandíbulas, pero fue atacada por Diablo que ideó una poción para controlarla. Esa noche, Johnny descubre que el cristal místico de Ágatha sigue funcinando y le muestra a Crystal junto a Diablo en Centroamérica.

Johnny Storm se reencuentra con Crystal, que no le reconoce a causa de las drogas de Diablo. Éste intenta apoderarse de Tierra Verde haciendo pasar a Crystal por la diosa Ixchel, pero los 4 Fantásticos demuestran a los lugareños el engaño. Crystal sale de su trance, pero descubre por Johnny que Máximus se ha apoderado del Gran Refugio y se dispone a marcharse a ayudar al resto de la familia real de los Inhumanos.

Taku pide ayuda a los 4 Fantásticos tras la desaparición del Leopardo Negro en Rudyarda, vecina a Wakanda. La Antorcha Humana y la Cosa le encuentran en una cárcel de Rudyarda. Con ayuda de éstos, T'Challa descubre que el cerebro de la operación es Klaw, al que derrota.

Agatha Harkness advierte a los 4 Fantásticos de un peligro inminente. De repente, en los cielos de todo el mundo se obserba una extraña que figura que camina silenciosamente por el aire. El ser advierte que la humanidad está condenada y hace sonar su trompeta.

Gabriel anuncia el fin del mundo y los 4 Fantásticos se enfrentan a él, pero los derrota con facilidad. Estela Plateada utiliza su poder cósmico contra él y destruye la fuente de su poder, descubriendo que se trataba de un robot. Los héroes especulan sobre el creador del robot cuando aparece en ese momento Galactus que se dispone a dstruir la Tierra.

Galactus revela que ha venido a la Tierra en busca de Estela Plateada y ofrece la posibilidad de salvar ese mundo a cambio de él. Estela se niega a servir a Galactus y los 4 Fantásticos le atacan. Reed se introduce en la nave de Galactus y le amenaza con destruirla si no jura dejarles en paz para siempre.

Frente a la amenaza de Reed de destruir la nave de Galactus, éste le dice que no teme su muerte, pero que piense en las consecuencias para el mundo. Estela Plateada accede a servirle, pero Reed le dice que ni siquiera la supervivencia vale el precio de una rendición incondicional. Galactus les da tiempo para pensarlo, pero es atacado por el ejército. El presidente pide a los 4 Fantásticos que entreguen a Estela. Éste promete seguir a Galactus donde vaya en ese universo y Reed le devuelve su nave. Galactus se marcha, pero Reed evita que Estela le siga. Tras enfrentarse a él, Norrin Rad escucha a Richards, que le explica su plan. Reed pide a Agatha Harkness que utilice su poder para proyectar su imagen y su voz. De este modo, Reed explica a todo el mundo que no deben temer el regreso de Galactus, porque Estela no rompió su palabra y Galactus no volverá porque lo ha enviado fuera de ese universo, a la Zona Negativa.

Reed Richards se desmaya y los médicos diagnostican que sufre niveles extremos de agotamiento. Susan Richards es secuestrada por el Monstruo de la Laguna Perdida, que la lleva a una cueva. Susan utiliza su poder para volverse invisible y el monstruo cree que ha escapado. Sue aparta una roca y descubre que estaba ahí para evitar la entrada del agua, que inunda toda la cueva sin que pueda detenerla.

Susan Richards se crea una bolsa de aire lo bastante grande para cubrirle. Descubre que el Monstruo de la Laguna Perdida la necesitaba para admistrar medicinas para sanarles a él y a su pareja. Tras obtenerlas, se marchan en su nave.